lunes, 11 de mayo de 2015

Óxidos salinos


Oxidos Salinos

Resultan de unir o combinar 2 Oxidos simples de un solo elemento. Son Oxidos Binarios o tambien llamados Mixtos.

I) Fe, Co, Ni, Cr, Mn.--) 2+,3+
II) Pb.--) 2+,4+
IIOxidos salinosI)Bi.--) 3+,5+
IV) U, W.--) 4+,6+

Ejemplo:

Oxido Cobaltoso CoO
Oxido Cobaltico Co2O3

CoO + Co2O3 = Co3O4

N.T: Oxido Cobaltoso Cobaltico, Oxido Salino de Cobalto, Oxido Mixto de Cobalto, Oxido Doble de Cobalto
N.S: Oxido de Cobalto (II, III)
N.I: Tetraoxido de Triocobalto.

Anhídridos de los no metales

Anhídridos (no metal + oxígeno)

Los anhídridos son compuestos formados por un elemento no metálico más oxígeno. Este grupo de compuestos son también llamados óxidos ácidos u óxidos no metálicos.

Formulación de los anhídridos (óxidos ácidos o no metálicos)

Los anhídridos son formulados utilizando el símbolo del elemento no metálico junto a la valencia del oxígeno más el oxígeno junto a la valencia del elemento no metálico.
La fórmula de los anhídridos es del tipo X2On (donde X es un elemento no metálico y O es oxígeno). Entre los numerosos ejemplos de los anhídridos se encuentran: CO2, SO3, SeO, etc.


1. Nomenclatura tradicional: la nomenclatura tradicional de los anhídridos se realiza nombrando la palabra anhídrido seguido del elemento no metálico

2. Nomenclatura de stock: la nomenclatura de stock consiste en escribir la palabra "óxido" + elemento no metálico y a continuación el número de valencia del elemento no metálico en números romanos y entre paréntesis.
Ejemplos:
CO2: óxido de carbono (IV)
Br2O3: óxido de bromo (III)
3. Nomenclatura sistemática: la nomenclatura sistemática consiste en la utilización de un prefijo que depende del número de átomos de cada elemento seguido de la expresión "óxido" + el elemento no metálico precedido de la valencia del elemento no metálico.
Los prefijos utilizados dependiendo del número de átomos en esta nomenclatura son:
  • 1 átomo: Mono
  • 2 átomos: Di
  • 3 átomos: Tri
  • 4 átomos: Tetra
  • 5 átomos: Penta
  • 6 átomos: Hexa
  • 7 átomos: Hepta

lunes, 4 de mayo de 2015

Óxidos Básicos


Un óxido básico es un compuesto que resulta de la combinación de un elemento metálico con el oxígeno.
metal + oxígeno = óxido básico
Cuando reaccionan con agua forman hidróxidos, que son bases, y por eso su denominación. Los óxidos de los no metales se denominan óxidos ácidos.
Primero se escribe el nombre genérico del compuesto, que es óxido y al final el nombre del metal, esto es para metales con una valencia fija o única.
Ejemplo: óxido de sodio.
Fórmula: Siempre se escribe primero el símbolo del metal y después la del oxígeno Na2O el oxígeno siempre va a actuar con valencia -2.
Para nombrar a los óxidos básicos, se deben observar los números de oxidación, o valencias, de cada elemento. Hay tres tipos de nomenclatura: tradicional, por atomicidad y por numeral de Stock.

Química Inorgánica





La química inorgánica estudia la composición, formación, estructura y las reacciones químicas de los elementos y los compuestos inorgánicos, es decir, realiza los estudios de todos aquellos compuestos en los que no participan los enlaces carbono-hidrógeno. Los compuestos inorgánicos existen en menor proporción en cantidad y variedad que los compuestos orgánicos.





 

 Clasificación de los compuestos inorgánicos


Los compuestos inorgánicos se dividen según su estructura en:
  • Compuestos binarios:
    • Óxidos metálicos
    • Anhídridos
    • Peróxidos
    • Hidruros metálicos
    • Hidruros volátiles
    • Hidrácidos
    • Sales neutras
    • Sales volátiles
  • Compuestos ternarios:
    • Hidróxidos
    • Oxoácidos
    • Oxisales

 

Nomenclatura de los compuestos inorgánicos

 


La forma de nombrar a cada uno de los compuestos es diferente por cada uno de los grupos que existen. Las reglas que se deben de seguir para nombrarlos de forma correcta se encuentran en cada uno de los tipos de compuestos. En cada sección podrás aprender las normas correctas para saber nombrar a cada tipo de compuesto inorgánico ya sea óxido, hidruro, sal binaria, etc.

lunes, 20 de abril de 2015

Quimica moderna

Química moderna, etapa de la química dedicada al estudio de la estructura y composición, propiedades y transformación de las sustancias. Es a esto que se dedica la Química. Dicho así, puede parecer una empresa limitada pero lejos de ello. Su ámbito de actuación lo abarca todo pues todo el mundo conocido, sea líquido, sólido, gas o plasma, está formado por elementos químicos o compuestos de los mismos. Incluidos nosotros: el cuerpo humano es un agregado de átomos y moléculas que interaccionan. Por Annia Domenech de Caos y Ciencia. 

  




Antoine Lavoiser: el padre de la química moderna
Los numerosos e importantes experimentos y descubrimientos hechos en relación con los gases durante casi cincuenta años tenían que ser reunidos en una teoría global, cosa que ocurrió hacia finales del siglo XVIII. El encargado fue el químico francés Antoine Laurent Lavoiser. Lavoiser nació en París en 1743. En 1766 ganó una medalla de oro en un concurso convocado por la Academia de Ciencias de su país sobre técnicas de alumbrado público.
A fines de la década de 1760, Lavoiser ya había realizado una serie de experimentos que partían de los hallazgos de Joseph Black, con los que demostró que el agua no podía transformarse en tierra. Cuando en 1774 Priestley viaja a París y le comunica a Lavoisier su descubrimiento del aire deflogistizado, al investigador francés le queda claro que el aire no es un elemento inerte que recibe o entrega el flogisto, sino que el supuesto aire deflogistizado constituye un elemento. Repite los experimentos de Priestley con el óxido de mercurio y en 1775 aísla el aire “puro”. Desarrolla la idea de que en toda combustión lo que ocurre es una destrucción del aire “puro”, y el peso del cuerpo que ardió se aumenta exactamente en la misma cantidad del aire absorbido. Se opone así Lavoisier a la teoría del flogisto sobre la combustión. En esa época, se aceptaba que cuando metales como el estaño y plomo se calentaban en un recipiente cerrado que contenía aire, se observaba el aumento del peso del “calcinado” y la constancia del peso del sistema total, al tiempo que se crea un vacío parcial en el interior del recipiente y sólo aproximadamente una quinta parte del volumen del aire se consume. La interpretación que da Lavoisier a estos hechos es bien distinta de la de colegas británicos como Priestley y Black. Los metales no liberan flogisto al calcinarse sino que se combinan con un elemento componente del aire que es el que se había identificado como aire “puro”, y de ahí su incremento de peso. A partir de entonces nombra este nuevo elemento gaseoso como oxígeno.
En 1789, casi coincidiendo con la Revolución Francesa, Lavoisier publicó su Tratado elemental de química. Este libro fijaba los fundamentos de la química como una disciplina genuinamente científica, y los químicos suelen considerarlo como el equivalente en química de lo que fueron los Principia Matemática de Newton. Lavoiser expone en este libro el método cuantitativo para interpretar las reacciones químicas y propone el primer sistema de nomenclatura para los compuestos químicos, del que aún perduran por ejemplo, la clasificación de los compuestos binarios del oxígeno. Además, proporcionaba detalladas descripciones de las técnicas utilizadas, incluido el equipamiento y el tipo de experimentos realizados.
Por otro lado, estableció la definición más clara de lo que era un elemento químico, poniendo por fin en práctica la idea que había tenido Robert Boyle durante la década de 1660, relegando definitivamente a los cuatro elementos de los griegos. Se entiende por elemento toda aquella sustancia que no puede descomponerse en otras más sencillas. Además, presentó la primera tabla de los elementos que, aunque muy incompleta, se puede considerar como la base a partir de la cual surgió la tabla periódica moderna.
El listado de las 33 sustancias simples presentando por Lavoisier tiene el siguiente encabezamiento: “Sobre la tabla de las sustancias simples o, al menos, de aquellas que el estado actual de nuestros conocimientos nos obliga a considerar como tales”, e incluye, entre otras, la luz y el calórico. Los nombres dados a las sustancias hasta entonces pretendían identificar cada sustancia según alguna de sus propiedades. Así, por ejemplo, las denominaciones asignadas se referían al color, al sabor, a una propiedad medicinal o al nombre del descubridor. Los compuestos se clasificaban por familias según los elementos que los constituían, adoptándose el acuerdo de nombrar en primer lugar la familia a la que pertenecían y en segundo lugar su rasgo específico (óxido de hierro). La proporción entre dos elementos que formaban más de un compuesto se indicaría cambiando la terminación del nombre específico. Las sales tomarían el nombre genérico del ácido y el específico de la base. La química adquiría así un lenguaje analítico, metódico y preciso, que permitía nombrar a cualquier nueva sustancia que se descubriese. Además, facilitó enormemente la tarea de los químicos a la hora de comunicarse los descubrimientos los unos a los otros.



Química




Química (palabra que podría provenir de los términos griegos χημία o χημεία, quemia y quemeia respectivamente) es la ciencia que estudia tanto la composición, estructura y propiedades de la materia como los cambios que ésta experimenta durante las reacciones químicas y su relación con la energía.Es definida, en tanto, por Linus Pauling, como la ciencia que estudia las sustancias, su estructura (tipos y formas de acomodo de los átomos), sus propiedades y las reacciones que las transforman en otras sustancias. La química moderna se desarrolló a partir de la alquimia, una práctica protocientífica de carácter filosófico, que combinaba elementos de la química, la metalurgia, la física, la medicina, la biología, entre otras ciencias y artes. Esta fase termina al ocurrir la llamada, Revolución de la química, basada en la ley de conservación de la materia y la teoría de la combustión por oxígeno postuladas por el científico francés, Antoine Lavoisier.